El presupuesto de la tierra se ha agotado desde el 2015

Desde el 2015 la Humanidad consume el presupuesto de la tierra. El Día del Sobregiro de la Tierra es el marcador anual de cuándo comenzamos a vivir más allá de nuestras posibilidades en un año determinado. 

Si bien solo es una estimación aproximada de las tendencias de tiempo y recursos, el Día del Sobregiro de la Tierra es lo más cerca que puede estar la ciencia de medir la brecha entre nuestra demanda de recursos y servicios ecológicos y cuánto puede proporcionar el planeta.

¿Cómo se calcula el presupuesto de la Tierra? El cálculo consiste en dividir la biocapacidad de la Tierra o Presupuesto de la Tierra entre la huella ecológica mundial -la presión que la actividad humana ejerce sobre las tierras de cultivo, las de pastoreo, las forestales y las edificadas, además de las zonas de pesca- y en multiplicar ese resultado por los 365 días del año.

El planeta agota hoy sus recursos naturales para todo 2023 y entra en números rojos, algo que en España ocurrió en mayo.

El costo del gasto excesivo de la Humanidad agotó el presupuesto de la Tierra

A lo largo de la mayor parte de la historia, la humanidad ha utilizado los recursos de la naturaleza para construir ciudades y carreteras, para proporcionar alimentos y crear productos, y para absorber nuestro dióxido de carbono a un ritmo que estaba dentro del presupuesto de la Tierra. Pero a mediados de la década de 1970, cruzamos un umbral crítico: el consumo humano comenzó a superar lo que el planeta podía reproducir.

Según los cálculos de Global Footprint Network, nuestra demanda de recursos ecológicos renovables y los servicios que brindan es ahora equivalente a la de más de 1,5 Tierras. Los datos nos muestran en camino de requerir los recursos de dos planetas mucho antes de mediados de siglo.

El hecho de que estemos usando, o “gastando”, nuestro capital natural más rápido de lo que puede reponerse es similar a tener gastos que exceden continuamente los ingresos. En términos planetarios, los costos de nuestro gasto ecológico excesivo son cada día más evidentes. 

El cambio climático, como resultado de la emisión de gases de efecto invernadero más rápido de lo que pueden ser absorbidos por los bosques y los océanos, es el resultado más obvio y posiblemente apremiante. 

Pero hay otros: la reducción de los bosques, la pérdida de especies, el colapso de las pesquerías, el aumento de los precios de las materias primas y los disturbios civiles, por nombrar algunos. Las crisis ambientales y económicas que estamos experimentando son síntomas de una catástrofe inminente. La humanidad simplemente está utilizando más de lo que el planeta puede proporcionar. Seamos más responsables.