Las herramientas digitales están transformando las regulaciones de sostenibilidad en un motor de crecimiento para las empresas y organizaciones. En un contexto donde la sostenibilidad dejó de ser una opción para convertirse en una necesidad urgente, la tecnología digital emerge como un aliado clave para acelerar la transición hacia modelos de negocio más responsables y eficientes.
Las herramientas digitales permiten la digitalización; un catalizador de sostenibilidad. La digitalización permite a las empresas optimizar procesos, reducir costos y minimizar su impacto ambiental. Herramientas como la inteligencia artificial, el Internet de las cosas (IoT) y el blockchain facilitan la trazabilidad y transparencia en la cadena de valor, lo que no solo ayuda a cumplir con regulaciones ambientales y sociales, sino que también impulsa la innovación y mejora la competitividad
Por ejemplo, la digitalización a través de herramientas digitales permite reducir el consumo de papel, energía y recursos naturales, contribuyendo a la mitigación del cambio climático. Además, tecnologías como el 5G favorecen el intercambio eficiente de datos con menor consumo energético, y el análisis de grandes datos (big data) se utiliza para frenar el calentamiento global mediante mejores decisiones basadas en información precisa.
Beneficios económicos y sociales de las herramientas digitales para la digitalización sostenible:
- Las herramientas digitales permiten la automatización y precisión en la gestión de datos liberan tiempo para actividades de mayor valor.
- Las herramientas digitales aportan transparencia y trazabilidad lo que mejora la confianza de inversores y consumidores
- Las herramientasa digitales promueven la inclusión social al facilitar el acceso a la información y educación, ayudando a cerrar brechas digitales y desigualdades.
- La implementación de herramientas digitales en sectores clave podría reducir las emisiones globales de CO2 en 12 gigatoneladas para 2030, impulsando un crecimiento sostenible basado en la eficiencia y la innovación tecnológica
Herramientas digitales clave para cumplir regulaciones y fomentar la circularidad
Las herramientas digitales convierten las regulaciones de sostenibilidad en un catalizador de crecimiento al transformar obligaciones legales en oportunidades para innovar, optimizar recursos y mejorar la competitividad. La integración de estas tecnologías en las estrategias empresariales y gubernamentales es fundamental para enfrentar los retos ambientales y sociales actuales, asegurando un desarrollo económico más resiliente, equitativo y sostenible.
Una de las herramientas digitales que destaca es el Pasaporte Digital de Productos (DPP), que responde a regulaciones como el Reglamento sobre Diseño Ecológico de Productos Sostenibles (ESPR). El DPP recopila y organiza información relevante durante todo el ciclo de vida de un producto, facilitando la circularidad, la sostenibilidad y el cumplimiento legal. Esto permite extender la vida útil de los productos, promover la reutilización, facilitar la reparación y crear nuevos mercados circulares.
Asimismo, plataformas de gestión de sostenibilidad ayudan a las empresas a integrar la sostenibilidad en sus operaciones diarias, facilitando a través de herramientas digitales la recopilación, análisis y reporte de datos ESG (ambientales, sociales y de gobernanza). Estas plataformas aseguran el cumplimiento normativo, reducen riesgos legales, optimizan recursos y costos, y fortalecen la reputación corporativa al evitar prácticas de greenwashing.
Regulaciones de sostenibilidad clave para la industria limpia
Las regulaciones de sostenibilidad son un factor decisivo para la industria. Sin embargo, en lugar de tratar la regulación como un centro de costos, ¿Qué pasaría si las empresas químicas, por ejemplo, pudieran usar herramientas digitales para convertir la sostenibilidad en un motor de crecimiento?
Caso práctico. La industria química es el motor de la sostenibilidad. Facilita nuevos modelos de negocio, como la generación de energía verde, y es fundamental para la producción de materiales más ecológicos, como compuestos de litio y fibras de carbono para su uso en baterías y vehículos eléctricos.
En el ámbito del reciclaje, donde los esfuerzos se han centrado en la clasificación mecánica y la reutilización de materiales, la innovación en los procesos químicos demuestra cómo podemos recuperar los materiales usados a sus modelos básicos, cerrando así el ciclo de la circularidad.
Pero cada vez más, la atención se centra en cómo se producen estos catalizadores industriales y económicos, así como en innumerables otros artículos de uso diario, desde detergentes y limpiadores domésticos hasta polímeros, aditivos alimentarios y materiales de construcción.
Al igual que en otras industrias, el escrutinio regulatorio está creciendo. La Debida Diligencia de Sostenibilidad Corporativa (CDSD) de Europa exige una divulgación más exhaustiva de la que muchas empresas estaban preparadas. Su Mecanismo de Ajuste en Frontera de Carbono (CBAM) ha aumentado las exigencias para las exportaciones con altas emisiones. Los gobiernos asiáticos también buscan cada vez más información sobre toxicidad y emisiones ambientales. Los accionistas y los grupos de salud pública en Estados Unidos exigen una mejor gestión ambiental a través de herramientas digitales. Y debido a nuestro mundo interconectado, las regulaciones en un mercado pueden afectar las operaciones en otros.
Dondequiera que se encuentre, el cumplimiento normativo es simplemente una cuestión de cuándo, no de si se cumplirá. Cada nueva política añadirá otra capa de fricción administrativa. Pero si las empresas están dispuestas a actuar con astucia, estas restricciones pueden convertirse en una ventaja competitiva.
No vea estas normas como trampas, sino como invitaciones, aunque severas, a reimaginar las operaciones a través de una perspectiva digital.
Usa las regulaciones a su favor
Aceptar las limitaciones y barreras puede impulsar la innovación, la creatividad y la innovación, según demuestran las investigaciones. En lugar de considerar las regulaciones como un lastre para las ganancias, es útil replantearlas como un trampolín para la investigación y el desarrollo.
Al aprovechar tecnologías y herramientas digitales industriales como el Internet de las Cosas (IdC) y la inteligencia artificial (IA), las empresas químicas pueden transformar estas limitaciones en oportunidades para diseñar modelos de negocio más sostenibles y abrir nuevas vías de crecimiento hacia un futuro con bajas emisiones de carbono.
Basta con observar el caso de Aker Carbon Capture, que está ampliando su negocio constantemente a través de las herramientas digitales, priorizando la sostenibilidad, de recopilar las emisiones de gases de efecto invernadero antes de que se liberen a la atmósfera.
Nivelar la producción ya es bastante difícil, pero cuando los equipos se encuentran en diferentes partes del mundo, deben colaborar de formas radicalmente nuevas. Unificar el diseño y la ingeniería en la nube ha logrado precisamente eso. Equipos de Noruega, India y otros lugares pueden trabajar juntos en torno a un modelo 3D en tiempo real, acelerando el diseño de plantillas y P&ID. No solo cometen menos errores por el uso de herramientasa digitales y reducen la necesidad de reelaboración, sino que los tiempos de FEED se han reducido en un 20 %. Es un proceso repetible y rentable que no solo reduce el desperdicio sino que también aumenta la velocidad de entrega del proyecto.
Covestro ha observado que la innovación de procesos genera beneficios similares. Si bien los productos plásticos y poliméricos aún no están totalmente cubiertos por las normas de Ecodiseño de la Unión Europea de 2024, el fabricante global se ha comprometido a alcanzar cero emisiones netas de alcance 1 y 2 para 2035. Por ello, está diseñando polímeros ecológicos revolucionarios que utilizan materias primas renovables de origen biológico, además de impulsar la eficiencia energética y de los materiales en todos los ciclos de producción con el uso constante de herramientas digitales.
El software de simulación de procesos con IA ha sido indispensable para lograr estos objetivos, permitiendo a Covestro modelar nuevos procesos a lo largo de la cadena de valor: predecir el comportamiento de su revolucionario polímero ecológico, comprender la mejor manera de producir productos sostenibles a escala y sugerir métodos de fabricación más rápidos y con menor consumo energético.
Exportar estos procesos a un gemelo digital de sus operaciones ha generado nuevas ventajas para el fabricante de materias primas de poliuretano y policarbonato. Con una plataforma única y fácil de usar que une diferentes unidades operativas, Covestro ha mejorado la transparencia y la trazabilidad de los procesos, a la vez que ha reducido el consumo de energía en un 30% y las emisiones en un 39%. El cumplimiento se convierte en un subproducto de la eficiencia, no en una carga burocrática.
Pasar a lo digital para impulsar la innovación
Como vemos en Covestro, la transformación digital ayuda a alinear la preparación regulatoria con la diferenciación en el mercado.
Invertir en plataformas y tecnologías digitales como el IoT y la IA facilita la optimización en tiempo real de la integración térmica, la secuenciación de lotes y el control del rendimiento. Esto significa que las empresas químicas pueden operar de forma más sostenible, reduciendo el uso de recursos al hacer más con menos, incluso mientras se enfrentan a desafíos como las tensiones geopolíticas y la escasez de personal. Se trata de un doble resultado: un ecosistema digital integrado no solo garantiza el cumplimiento normativo, sino que también impulsa el aumento de la eficiencia, la innovación y, en última instancia, el valor empresarial.
La mayoría de los líderes de la industria química (89%) coinciden en que su organización debe aprovechar el poder de las tecnologías digitales antes de poder acelerar sus agendas de sostenibilidad, según el informe AVEVA Industrial Intelligence Index 2024.
Una encuesta independiente de Deloitte identifica las principales áreas de acción para la IA y otras tecnologías digitales: acelerar la investigación y el desarrollo (I+D) de productos sostenibles, predecir cómo los cambios en un área de producción afectan a otros procesos y obtener información valiosa de los datos rastreados a lo largo de toda la cadena de valor.
Pero hay una salvedad: la tecnología no es una panacea. Para que las herramientas digitales impulsen significativamente el crecimiento sostenible de la industria, deben estar respaldadas por una inversión de capital considerable, una cartera de talento cualificado y una participación activa en las políticas. Solo con un sólido diálogo político e inversiones financieras, la industria puede convertir los desafíos regulatorios en oportunidades de crecimiento.
A medida que los responsables políticos endurecen las restricciones sobre las emisiones industriales y los inversores exigen pruebas de impacto, las empresas que inviertan hoy en capacidad digital estarán mejor preparadas para competir en los mercados del futuro con responsabilidad social de las emisiones. Las empresas con visión de futuro no esperarán a que se les obligue a actuar.