5 beneficios del frío moderado para un envejecimiento saludable

¿Sabías que el frío moderado ayuda a envejecer sano? Las temperaturas moderadamente frías aumentan la longevidad y disminuyen la susceptibilidad a las enfermedades relacionadas con la edad, según una investigación realizada en la Universidad de Colonia.

Beneficios para la salud del frío moderado:

  1. Las temperaturas frías activan un mecanismo de limpieza celular llamado proteasoma que descompone las agregaciones de proteínas defectuosas y ayuda a evitar que las proteínas se aglutinen .
  2. Las enfermedades relacionadas con los genes, como la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y la enfermedad de Huntington, se caracterizan por la acumulación de depósitos de proteínas dañinas .
  3. Los investigadores expusieron un organismo no vertebrado, el nematodo Caenorhabditis elegans, y células humanas que habían sido cultivadas para llevar estos genes de enfermedades al frío. Las bajas temperaturas eliminaron activamente los grupos de proteínas, deteniendo una mayor acumulación de grupos de proteínas.
  4. Incluso una caída moderada de la temperatura estimula el proteasoma para activar su actividad de limpieza celular, lo que tiene implicaciones para el envejecimiento y las enfermedades asociadas al envejecimiento.
  5. El envejecimiento es un factor de riesgo para varias enfermedades neurodegenerativas involucradas en la agregación de proteínas, incluidas la enfermedad de Alzheimer, la de Parkinson, la de Huntington y la ELA. Los científicos creen que estos resultados pueden aplicarse a otras enfermedades neurodegenerativas relacionadas con la edad.

Ciencia confirma que el frío moderado ayuda a prolongar la vida en animales

Una temperatura corporal más baja es uno de los mecanismos más efectivos para prolongar la vida de los animales. Escribiendo en ‘Nature Aging’, un grupo de trabajo del CECAD Cluster of Excellence in Aging Research de la Universidad de Colonia ha descrito con precisión cómo funciona esto. Los científicos muestran que el frío puede prevenir la agregación patológica de proteínas típica de dos enfermedades neurodegenerativas asociadas al envejecimiento.

El frío moderado activa un mecanismo de limpieza celular que descompone los agregados de proteínas dañinas responsables de diversas enfermedades asociadas con el envejecimiento. En los últimos años, los estudios en diferentes organismos modelo ya han demostrado que la esperanza de vida aumenta significativamente cuando se reduce la temperatura corporal. 

Sin embargo, aún no está claro cómo funciona esto en muchas áreas. Un equipo de investigación del CECAD Cluster of Excellence in Aging Research de la Universidad de Colonia ha desbloqueado un mecanismo responsable. El estudio ‘La temperatura fría extiende la longevidad y previene la agregación de proteínas relacionadas con la enfermedad a través de los proteosomas inducidos por PA28γ’ ha aparecido en Nature Aging.

El envejecimiento es un factor de riesgo importante para varias enfermedades neurodegenerativas asociadas con la agregación de proteínas, incluidas la enfermedad de Alzheimer, la de Parkinson, la de Huntington y la ELA

La clave es el frío moderado; evitar el frío extremo. Desde hace tiempo se sabe que mientras que las temperaturas extremadamente bajas pueden ser dañinas para los organismos, una reducción moderada de la temperatura corporal puede tener efectos muy positivos.

Por ejemplo, una temperatura corporal más baja prolonga la longevidad de animales de sangre fría como gusanos, moscas o peces, cuya temperatura corporal fluctúa con la temperatura del ambiente. Sin embargo, el mismo fenómeno también se aplica a los mamíferos, que mantienen la temperatura de su cuerpo dentro de un rango estrecho sin importar cuán frío o cálido sea su entorno. 

Por ejemplo, el nematodo vive mucho más tiempo si se mueve de la temperatura estándar de 20 grados centígrados a una temperatura más fría de 15 grados centígrados. Y en los ratones, una ligera disminución de la temperatura corporal de solo 0,5 grados extiende significativamente su vida útil.

Incluso en humanos, se ha informado una correlación entre la temperatura corporal y la vida útil. La temperatura normal del cuerpo humano está entre 36,5 y 37 grados centígrados. Mientras que una caída aguda de la temperatura corporal por debajo de los 35 grados conduce a la hipotermia, la temperatura del cuerpo humano fluctúa ligeramente durante el día e incluso alcanza los 36 grados fríos durante el sueño. 

Curiosamente, un estudio anterior informó que la temperatura del cuerpo humano ha disminuido constantemente en 0,03 grados centígrados por década desde la Revolución Industrial, lo que sugiere un posible vínculo con el aumento progresivo de la esperanza de vida humana en los últimos 160 años.

La mala noticia es que las olas de calor van en aumento. En 2019 Italia registró altas temperaturas de casi 50 grados en el verano.